Las bajas temperaturas empezaron a hacerse sentir en los últimos días, por lo que tanto el frío, como el viento, la escasa humedad del ambiente y la calefacción, favorecen especialmente la deshidratación de la piel, haciendo que se vea opaca, más seca, más arrugada, y luzca envejecida.
Igualmente, hay enfermedades que pueden desencadenarse en esta época, como las urticarias (ronchas que pican) y los sabañones (lesiones inflamatorias, dolorosas, de color azulado localizadas generalmente en dedos, orejas y nariz), que pueden complicarse y hasta llegar a ulcerarse.
“Generalmente, la piel luce más roja, se siente más tirante, e incluso a veces puede lucir como craquelada. Esto empeora si uno trabaja al aire libre y debe estar expuesto al frio y el viento”, es lo que mencionó a este medio Rocío Marecos, dermatóloga especialista en oncología cutánea y cirugía de Mohs.
Cambios en el cuidado de la piel
La misma, mencionó además que ciertas formas de cuidado de la piel deben de cambiarse en esta época del año. “La piel se comporta de una manera distinta en climas fríos y secos, y en estos casos es importante cambiar su cuidado. Por ejemplo, en vez de un jabón o gel de limpieza, utilizar un limpiador tipo syndet (jabón) o en aceite; también, a la hora de hidratar la piel utilizar algo con mayor contenido graso como cremas y bálsamos en vez de geles hidratantes”.
Vale mencionar que, los bálsamos y cremas actúan mejor como barrera de protección contra el viento o la sequedad que puede generar la calefacción.
“Tratar de que durante la ducha el agua no esté tan caliente, y que la misma no dure más de 8 minutos”
Tiempo de ducha y utilización de protector solar
Por otra parte, la profesional habló de la forma en que se deben de realizar las duchas en días con baja temperatura. “Tratar de que durante la ducha el agua no esté tan caliente, y que la misma no dure más de 8 minutos”, explicó.
Normalmente, se recomienda usar agua tibia, entre 25° y 35°C, para evitar la irritación y la pérdida de humedad natural de la piel.
La profesional, recomendó además cuidar la cantidad de horas de exposición al aire libre, y también hacer hincapié en que el protector solar también se puede seguir usando en invierno.
Otros cuidados
-Consumir al menos dos litros diarios de agua
-Limpiar la piel dos veces por día (a la mañana y a la noche).
-Proteger los labios con cremas lubricantes con glicerina, silicona o manteca de karité
-Evitar el contacto directo de la piel con la lana, ya que fomenta la aparición de manchas rojizas, picazón y dermatitis. Tampoco utilizar ropa muy ajustada
-Intentar no exponerse a las estufas o fuentes de calor en forma directa (puede provocar resequedad).