01 may. 2025

Tortura psicológica en adolescentes: pueden desarrollar estrés postraumático y depresión

El caso de un padre que torturó sicológicamente a su hija apuntándola con un rifle, generó indignación en la sociedad. Un hecho así, puede causar un golpe psicológico muy fuerte en un adolescente, por lo que como padres, lo primordial en una discusión con los hijos es “convalidar sus emociones”.

5fa274491b3e6.jpeg

El hecho sucedió en la ciudad de Limpio, y el sindicado alegó que era para “corregir” a su hija por el uso excesivo e inadecuado del celular. Tras la denuncia fue detenido e imputado.

En conversación con Melissa Sánchez, psicóloga, la misma se refirió a todo lo que puede generar en la mente de un adolescente, una tortura psicológica como la que sufrió la niña de 15 años por parte de su padre.

El impacto de la tortura psicológica en un adolescente
“Demuestra un control absoluto del otro, por lo que la adolescente no tiene espacio para expresarse ni para negociar. Una tortura psicológica de este tipo puede generar un trauma y un miedo profundo, la sensación de que su hogar ya no es un espacio seguro”, empezó comentando la profesional, quien citó otros aspectos negativos que puede ocasionar, como:

pexels-inzmamkhan11-1134204.jpg

-Posible daño psicológico a largo plazo: Puede desarrollar estrés postraumático, ansiedad o depresión, etc.

-Desvalorización personal: “Puede sentir que su existencia no tiene importancia para su padre”.

-Ansiedad y desregulación emocional: “Puede desarrollar ataques de pánico, insomnio o hipervigilancia, etc”.

-Dificultades en la confianza y relaciones futuras: “Podría crecer con la creencia de que el amor se expresa con violencia o autoritarismo”.

-Posible repetición del patrón: “Sin intervención, es probable que en su adultez tenga relaciones donde normalice la violencia”.

“Una tortura psicológica de este tipo puede generar un trauma y un miedo profundo, la sensación de que su hogar ya no es un espacio seguro”
Melissa Sánchez, psicóloga

La forma correcta de hablar con los hijos
Para Sánchez, lo más importante es validar la experiencia emocional del, o la adolescente, sin minimizar sus emociones ni vivencias. Algunas recomendaciones son:

-Escucha activa y empatía: Evitar respuestas como “no es para tanto” o “ya se va pasar”, ya que invalidan su emoción. En su lugar, usar frases como “veo que estás sintiéndote realmente mal por esto”.

-Explorar la emoción: Preguntar: "¿qué significa para vos que quiten el teléfono? Darle espacio para expresar su mundo interno, respetando su ritmo y tiempo.

-Autoconciencia y responsabilidad emocional: Ayudarla a reconocer que su dolor es real, pero que hay formas de gestionarlo sin dañarse. Ejemplo: “Cuando decís que quieres hacerte daño… ¿qué estás buscando? ¿Qué te gustaría que pasara realmente?”

Urgente ayuda psicológica para el padre y toda la familia
En cuanto al padre, el mismo debería de recibir ayuda profesional, al igual que toda la familia. “El acompañamiento profesional es fundamental para trabajar su manejo de la ira, patrones de crianza, posibles traumas personales y su forma de vincularse”.

Sánchez, agregó que en casos como éste, no necesariamente se da una falta de cariño, pero sí una falta de recursos emocionales y habilidades para expresar el afecto de manera sana. “Muchas veces, los padres aman a sus hijos, pero no saben cómo demostrarlo sin recurrir a la violencia o la imposición del poder”.

“Fomentar el diálogo sin miedo, implementar espacios de comunicación donde el adolescente pueda expresar sus emociones sin ser castigado, trabajar en formas de disciplina que no impliquen violencia ni amenazas”, son otras maneras de manejar de forma ideal las conversaciones con los hijos.