Es bien sabido que, la ausencia de los padres, ya sea por falta de presencia física o afectiva, puede tener un impacto muy negativo en los niños dentro en el ambiente escolar. Más aún, atendiendo a que acabamos de pasar por una fecha tan importante como el Día de la Madre, y el Día del Padre que se conmemora este domingo.
Robert Núñez, conocido profesional en pediatría, en sus redes habló de lo duro que es para un niño o niña sin madre, sin padre, o incluso sin ambos, tener que soportar celebraciones como el Día de la Madre y Día del Padre en la escuela. Por ello, el mismo recomienda directamente celebrar el Día de la familia.
“En las escuelas y colegios ya no se debería celebrar el Día del Padre o el Día de la Madre como si todos los niños tuvieran una familia ‘tradicional’, porque la realidad golpea todos los días cuando van al consultorio: niños criados por abuelas, abuelos, tías, hermanos mayores, incluso vecinas solidarias. Niños que no saben lo que es tener una madre o un padre presente. Niños con ausencias que duelen”, empezó diciendo.
“Vivimos en un país donde se dice ser ‘pro familia’, pero muy pocas familias son funcionales y la mayoría lucha en soledad”, agregó el profesional, refiriéndose a que en muchos casos, son madres que crían solas a sus hijos, o padres que aparecen una vez al mes; o muchos otros casos, hogares desbordados por la violencia, el abandono o la migración forzada.
Cambio cultural
Núñez, incluso habla en su posteo de un cambio de cultura, de modo a que se empiece a celebrar también a la familia en general, puesto que muchas veces, son los tíos, hermanos o abuelos, quienes realizan el rol de padres.
De hecho, habla de que actos como escolares por el día del padre y la madre, resultan excluyentes con muchos chicos. “Urge un cambio cultural. No más actos escolares que excluyen, que hieren, que visibilizan lo que falta. Es hora de que celebremos el Día de la Familia, donde quien acompaña, cuida y ama tenga su lugar, sin etiquetas ni moldes”.
“La realidad golpea todos los días cuando van al consultorio: niños criados por abuelas, abuelos, tías, hermanos mayores, incluso vecinas solidarias. Niños que no saben lo que es tener una madre o un padre presente. Niños con ausencias que duelen”
“No se trata de borrar el amor de una mamá o un papá, se trata de no olvidar a todos los que también sostienen, aunque nadie los nombre”, agregó.
Finalmente, el médico pidió incentivar la cultura de la familia en las escuelas, y que no divida a la misma. “Que refleje lo que somos como sociedad y que respete la realidad emocional de nuestros niños”.
Consecuencias de la ausencia materna o paterna
Melissa Sánchez, psicóloga infantil del Centro Gestáltico del Paraguay, explicó el impacto de la ausencia de uno de los padres, o ambos, en la vida de un menor.
“La ausencia de una figura parental puede representar un vacío significativo en el desarrollo emocional del niño, pero el impacto dependerá de varios factores como la edad, el vínculo previo, la manera en que se maneja la ausencia y la calidad de las figuras que acompañen”, comentó.
En algunos niños pueden aparecer ansiedad, miedos intensos (a quedarse solo), problemas de gestión emocional, problemas de conducta y hasta baja autoestima. Sin embargo, el apoyo, la contención de familiares como tíos, abuelos y hermanos, resultará sumamente importante para sobrepasar dicho proceso.
“El entorno vincular puede tener un rol reparador y organizador cuando se sostienen vínculos seguros, empáticos y presentes. Es muy importante tener en cuenta que cuando hay alguien que sostiene al niño/a con presencia y amor, la ausencia de otro puede doler menos y transformarse en una oportunidad de crecimiento”, cerró.
“cuando hay alguien que sostiene al niño/a con presencia y amor, la ausencia de otro puede doler menos y transformarse en una oportunidad de crecimiento”